Después de escapar de una relación abusiva, Katie regresa al hogar de acogida en el que creció sin saber que su madre adoptiva Marge guarda un secreto siniestro que data de una década. Ahora, Katie se ve atrapada en un horroroso drama familiar mientras se enfrenta, también, a un espíritu enojado llamado Abigail.
Me gustó mucho: la música, la historia, la sencillez de su argumento y, aunque no se trata de la mejor actuación vista, cumple con el propósito de entretener al expectador.